Mi querido @Alorza me trae a la memoria estas palabras que tenía olvidadas…
Goliardos
Giróvagos
En la Regla de San Benito se los describe de una forma más bien peyorativa: «La cuarta clase de monjes es la de los que se llaman giróvagos, porque se pasan la vida girando por diversos países, hospedándose tres o cuatro días en cada monasterio. Siempre están de viaje, nunca estables, sirven a su propia voluntad y a los placeres de la gula: en todo son peores que los sarabaítas. De su estilo de vida tan lamentable es mejor callar que hablar. Dejándolos, pues, de lado, nos dedicaremos, con la ayuda de Dios, a organizar la vida de los esforzados cenobitas».2
Sarabaítas
Se llamaron sarabaítas a ciertos monjes errantes y vagabundos que disgustados con la vida cenobítica no seguían ninguna regla y andaban de pueblo en pueblo viviendo a su discreción.
Este nombre viene del hebreo sarab que significa rebelarse. Casiano, en su conferencia 14 los llama Rennitæ, quia jugum regularis disciplinæ renuunt. No les hace más favor San Jerónimo, quien en su Epist. 18 ad Eustochium los llama remoboth, palabra egipcia casi equivalente a sarabaítas. San Benito en el cap. 1 de su Regla los llama giróvagos y los describe de forma poco ventajosa.
Los protestantes, enemigos declarados de la vida monástica, añadieron nuevos rasgos a esta descripción: dicen que los sarabaítas vivían de hacer milagros, de vender reliquias y de otras trampas de esta clase (Mosheim, Hist. eccles., siglo IV, parte 2, cap. 8, 15). Pero bastante malo había para decir sobre estos monjes relajados, sin tener que inventar contra ellos falsas acusaciones. San Jerónimo dice que vivían de su trabajo pero que vendían sus obras más caras que los otros, como si su oficio fuera más santo que su vida y que disputaban entre sí con bastante frecuencia, porque no querían estar sujetos a nadie: que ayunaban a porfía y tenían el silencio o el secreto por una victoria, etc.