El portavoz cree que si nacen niños feos los curas se abstendrán de tocarlos: “Hay que pensar que también tenemos nuestros límites, al fin y al cabo también tenemos principios.”

De momento, el Papa rezará durante 4 horas diarias para que se produzca el milagro. según el portavoz, lo hará ante la imagen de San Lucas Mártir o San Pedro Apóstol: “Creemos que es mejor que lo haga ante figuras masculinas. Las vírgenes suelen llevar niños y eso podría desconcentrarlo.”

De cara a próximas soluciones, el Vaticano no descarta implementar innovadoras ideas de otras religiones: “Estamos pensando en cambiar el uniforme de los monaguillos y adoptar el burka.”